Congregação Santíssimo Sacramento

Província Nossa Senhora de Guadalupe

3 Día – La Pascua Judía – Conferencia Eucarística

Fraternales saludos para todos los compañeros de la “Conferencia Eucaristía: Teología, Vivencia y Espiritualidad” dictada por el Padre Francisco Júnior De Oliveira Marques SSS.

Hoy, 14 de Julio de 2021, tercer día de este importante evento, hemos recibido con gran entusiasmo sus enseñanzas acerca de la celebración de la Pascua.

Los relatos bíblicos nos hablan sobre el camino del pueblo de Dios hasta llegar a Egipto, lugar de esclavitud; pero Dios compelido por su sufrimiento fue a su encuentro y con su bondad permitió su liberación. En el judaísmo, la Pascua o Pésaj, conmemora la historia del éxodo de los israelitas del antiguo Egipto, el paso por el mar Rojo, para ir a la tierra prometida, para volver en un sentido figurado, al “Jardín de las Delicias”.

La Pascua judía en el tiempo de Jesús comprende un conjunto de acciones rituales, que abarcan varias partes, como ser la inmolación del cordero, la aspersión de la sangre en las puertas de las casas y después en el altar de los holocaustos, la manducación.  La forma literaria de la Alianza era la Todah o confesión de los pecados a Dios.

Con Jesús se renovó la Alianza, y Él nos dio una vez más el “Jardín” de la vida.  En la última Cena, Cristo instituyó el sacrificio y convite pascual, por medio del cual el sacrificio de la cruz se hace continuamente presente en la Iglesia cuando el sacerdote, que representa a Cristo realiza lo que el mismo Señor hizo y encargó a sus discípulos que hicieran en memoria de Él. Cristo, en efecto, tomó en sus manos el pan y el cáliz, dio gracias, lo partió y lo dio a sus discípulos diciendo: “Tomad, comed, bebed; esto es mi Cuerpo; éste es el cáliz de mi Sangre. Haced esto en conmemoración mía”. De ahí que la Iglesia haya ordenado toda la celebración de la liturgia eucarística según estas mismas partes que corresponden a las palabras y gestos de Cristo.

El Padre Francisco Junior nos enseña, entre otras cosas, que la Plegaria Eucarística o Anáfora, se actualiza por intervención del Espíritu Santo el hecho salvífico de la Cruz y esta actualización se denomina Anámnesis, palabra de origen griego. No es un recuerdo ni una copia, sino una actualización, un Memorial de la Última Cena del Señor.  En la Epíclesis, momento de la Consagración, el sacerdote pone sus manos sobre las ofrendas e invoca al Espíritu Santo para la acción de Transubstanciación.

El Padre Francisco Junior nos explica la estructura romana literaria de la Celebración Eucarística,  comprende el Prefacio (inicio de la celebración preámbulo, donde se expresa- generalmente la confesión- y la grandeza de Dios),   el Santo (aclamación del Sacerdote que con los fieles rezan o cantan a Dios  dando gracias por la creación del universo), el Post-Santo (aclamación por la creación del hombre y la mujer a su imagen y semejanza), la Epíclesis ( por intermedio del Sacerdote, se invoca al Espíritu Santo sobre los dones para que queden consagrados), el Relato Institucional de las palabras de Jesús (consagración sobre las especies del pan y el vino), la Anámnesis (memoria de Cristo, recordándolo en su Pascua y de algunos Santos y la Virgen María),  otro pedido Epiclético  (pedido, súplica, de intercesión que con el Papa, los Sacerdotes, la Iglesia y  todos los que participen reunidos formemos un solo cuerpo y así experimentemos la belleza del “Jardín”).  Doxología final (expresa la glorificación de Dios “por Cristo con Él y en Él todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos” y así concluye y confirma la aclamación del pueblo con el “Amén”)

 

Interpreto que esta Conferencia del Padre Francisco Junior ha sido un valioso aporte para nuestra formación y una inspiración para profundizar en el estudio y progresar en nuestra formación. Muchas gracias y hasta el próximo encuentro (Jueves 15).

María Luz Rivas Diez, Laica Sacramentina de Buenos Aires, Argentina.

 

Share on facebook
Share on twitter
Share on whatsapp
Share on email
Share on print